De siempre
me ha llamado la atención la costumbre de llevar flores a los muertos.
Parece una contradicción, llevar tanta vida por las flores, y tanto colorido,... a
los cementerios,...que quitando el día de todos los santos, están tan solitarios .. y aparentemente tristes y silenciosos.
No me gusta nada el nombre de "cementerio". Una vez leí que alguien les llamaba "Quintana para muertos", y me lo he quedado.....
Hay en nuestros pueblos , los costeros, unas “quintanas de los muertos”, que por lo general tienen una vista al mar, espectaculares, o a las rías.
Hay en nuestros pueblos , los costeros, unas “quintanas de los muertos”, que por lo general tienen una vista al mar, espectaculares, o a las rías.
Carmen
Bermejo, refiriéndose a estas “quintanas”, decía que :”estos emplazamientos
mortuorios, establecen una especie de idilio entre la muerte y el agua”. Y me
gusta esta manera de entender.
En muchas culturas actuales, pasadas, y pasadísimas, cuando se muere o moría, un ser querido, o un importante dirigente , o el "chamán" de la tribu, se le rendía homenaje de una u otra forma ,...al final, todos actuamos poco más o menos de la mejor manera que sabemos. Tan solo se diferencian las maneras, el ritual, que
cada uno lo acopla a su forma de pensar.
También creo
que hay muchas culturas, que honran a la
memoria de sus muertos, con flores.
Dicen que
los muertos , en la antigüedad, eran expuestos al público durante varios días, supongo que con el propósito de ser velados y
despedidos.
Por aquellas
no existían las técnicas del embalsamiento y las que había eran muy caras, por
lo que aquellos cuerpos, ahí expuestos a la intemperie se descomponían y olían
fatal, y ya si era verano, ni te imaginas.
Para
enmascarar ese olorazo, quemaban incienso, y cubrían al muerto con todo tipo de
flores, lo que hacía que se disimulara un poco el olor y era mucho más
agradable velar al muerto.
Después , se
ve que quedó esta costumbre de llevar flores a los muertos .
Hoy, "La quintana de los muertos" de Barro estaba muy solitaria y extremadamente silenciosa, y efectivamente Carmen tiene razón, porque el idilio entre la muerte y el agua, hoy era casi casi palpable.
Hoy, "La quintana de los muertos" de Barro estaba muy solitaria y extremadamente silenciosa, y efectivamente Carmen tiene razón, porque el idilio entre la muerte y el agua, hoy era casi casi palpable.
Recuerdo un día en la “Quintana de Barro”, mirando El Bao en marea alta:
ResponderEliminarPor favor, Mariquilla un minuto de silencio por los vivos. Los hijos de mi amigo quedaron tan sorprendidos, que se hizo un silencio hasta en alta mar.
Expresiones
Piedra
Creo que cuando hacemos un minuto de silencio, en realidad es para todos. Los que no están , les recordamos los que si estamos en ese minuto de silencio.
ResponderEliminarDe modo que efectivamente hay que pedir un minuto de silencio por los vivos!!!! Claro que si